Salí algo tarde de casa por la mañana, con apenas 15 minutos para llegar a tiempo a mi trabajo, cuando normalmente son 25 minutos de trayecto, eso significaba que debía apresurarme en todo, usualmente cuando me pasa esto procuro irme a buena velocidad, sin dejar de respetar las señales de tránsito, y por supuesto a los demás conductores y uno que otro transeúnte, pero esta mañana debía hacer una especie de tiempo record para llegar a la hora, y lo más importante que mi jefe no me regañara, pero a veces todo parece ponerse en tu contra, te topas con todos los semáforos en rojo, conductores que justo este día decidieron que debían viajar a la velocidad de las tortugas, calles cerradas por reparaciones que te obligan a rodear por otro camino que hace más largo tu trayecto, en fin, toda una faena, pero no podía culpar a todo el mundo de mi situación, una que yo misma me había provocado por no salir a tiempo de casa, y en medio de toda aquella locura matutina, iba manejando como toda una psicótica sin apenas percatarme de el mundo que lentamente giraba a mi alrededor, de pronto decidí adelantarme a un vehículo por la derecha cuando frente a mis ojos vi a un hombre aproximadamente de la tercera edad que caminaba cerca de la acera, sobre el asfalto donde transitaban los autos, como si fuera a cruzar la calle pero siempre cerca de la acera, por un minuto voltee a verlo, sostenía un letrero con sus manos cerca de su pecho, lo tuve frente a mi solo un breve instante y alcance a leer lo que el letrero decía: “Favor de no tirar basura, mantén limpia tu ciudad….” y algo más, pero dadas mis prisas no alcance a leer, pero creo que no hizo mucha falta. Seguí adelante manejando pero mantuve contacto visual por el retrovisor de mi auto hasta que perdí a este hombre de vista. Esta persona se había levantado temprano para hacer un llamado a la sociedad para mantener limpia la ciudad donde vivimos, nadie lo estaba obligando, se veía que él había elaborado con pintura este letrero, solo decidió salir a caminar por esa gran avenida dando un mensaje que espero mucha gente haya visto, me mostro que tal vez solo sea como un grano de arena su acción, pero ese hombre despertó para hacer una” pequeña diferencia” en el mundo, si tan solo todos pensáramos un poco más como este hombre, sería una “gran diferencia” para hacer nuestro mundo un mejor lugar donde vivir. Yo iba de prisa pero recibí el mensaje, estoy segura de que tal vez otras personas ni siquiera voltearon, pero yo si estoy de acuerdo con él y lo transmitiré a todas las personas que pueda, es algo que todos sabemos que debemos hacer, pero hay que ser honestos, muy pocos lo llevan a cabo, es muy triste ver aun personas que tiran botellas, papeles en la calle y todo tipo de cosas sin importarles su medio ambiente, dando un mal ejemplo a las nuevas generaciones. Me puse a pensar en que este pequeño gesto lo puede llevar a cabo cualquier persona que tenga una buena razón en su corazón, y mañana levantarse temprano para hacer una gran diferencia en el mundo. Imagina que mensajes se podrían escribir que toquen los corazones de las personas, y que cada persona hiciera esta labor un día, y mañana otra persona, y mañana otra, un mensaje de paz y amor diferente cada día. ¿No sería grandioso hacerlo? El mío hoy es: “Ama y respeta a tu prójimo, pero sobre todo llénate de la luz del Amor de Dios”
Bella hoja que te meces al compás del viento Es fascinante observar tu suave movimiento Es como si el te diera nueva vida por momentos Tanta que al moverte se escucha un murmullo lento Eres esa pequeña parte verde del árbol Que piensas que por ser tan pequeña desapercibida pasa tu existencia Pero he visto que solo tú te meces diferente Con mucha energía y hasta cierto grado de alegría Te has hecho cómplice del viento Con tu baile le has conquistado y cada tarde el viento viene a provocarte, porque esa es su forma de admirarte Pero a la rama del árbol por ahora perteneces Sueñas con ir más lejos en compañía de tu amigo el viento Temes un día entusiasmarte y del árbol desprenderte Has olvidado una cosa, que tu tiempo junto al árbol no es permanente Un día el viento decidido vendrá y soplara tan fuerte que no importa cuanto quieras aferrarte, y lista debes ponerte, porque tu sentido de aventura terminará por poseerte Entonces sabrás que hay más allá d
Comentarios
Publicar un comentario
Agradezco de antemano sus comentarios, son realmente bienvenidos.