Aunque quisiera, no podría nunca alejarme de ti
Eres todo en mi vida ahora
Desde que me levanto en las mañanas hasta que me acuesto a dormir por las noches
Estas en todas partes, recordándome que existes
Cada respiración, cada movimiento, cada palabra que pronuncio, allí estas.
No podría olvidarte aunque quisiera
Porque de Ti he aprendido todo lo que sé
Y me sigues enseñando
Y siempre que tomo una decisión, eres Tú quien me guía
Todo lo bueno y lo malo que me pasa
Sucede porque tú lo permites para que yo aprenda, para que cumpla mi destino.
Siempre me guías por el camino correcto, aunque reconozco que yo misma me esfuerzo a veces para ir por el camino opuesto.
Cometo errores como cualquier ser humano, pero tú siempre me cuidas, me reprendes con el amor que solo Tú puedes dar, ese amor que es incondicional.
Algunas veces sufro al no entender porque no me das lo que yo deseo, pero te agradezco que así sea porque de esa forma aprecio mejor lo que tengo, y sé que lo haces por mi bien.
Me has bendecido con una gran mamá y una bella familia y aunque no siempre los valoro como merecen, tú te encargas de recordarme lo que realmente importa.
En mis momentos de alegría, de tristeza, en mis momentos de dudas o de temor, siempre estás allí dándome valor y tu protección.
Y te escribo esto con mucha emoción, porque justamente hoy, me diste las palabras que necesitaba escuchar este triste corazón, sabías exactamente que palabras decir, tan llenas de sabiduría y amor, me ayudaste a aceptarme tal como soy, y me mostraste lo valiosa que para ti yo soy.
No me dejes alejarme nunca de ti, no me dejes cometer ese gran error y trataré mi buen Señor cada día de mi vida ser mejor, pero no lo lograré sin tu perdón y comprensión.
“Gracias Dios Padre por tu gran amor”.
Comentarios
Publicar un comentario
Agradezco de antemano sus comentarios, son realmente bienvenidos.